domingo, 20 de noviembre de 2022

MI MASCOTA

 

Hace tiempo que tengo una mascota 
-y eso que está prohibido en el contrato-
pero es que mi mascota no hace ruido, 
no ladra ni maúlla ni me pide 
que la saque tres veces a la calle. 

No se mete con nadie, se pasea 
por mi pequeña casa contemplando 
los cuadros o los lomos de los libros, 
observa la carátula de un disco 
y a veces, si le gusta la música que suena, 

se queda quietecita, sin moverse 
del brazo del sofá o del cojín de flores 
que yo abrazo en mi vientre adormilada. 
No sé cuándo llegó pero al principio 
intenté que se fuera volando por los aires, 

abría la ventana y corría tras ella 
enarbolando algún insecticida, 
blandiendo un almohadón inútilmente. 
Pero siempre volvía como un enamorado 
que no ceja en su empeño de adorarme. 

Así que he decidido dejarle que me quiera 
y vivir en pareja de hecho, al fin y al cabo 
hasta una mosca me hace compañía.