domingo, 4 de marzo de 2018

ERA MI PRIMO



https://politica.elpais.com/politica/2018/03/03/actualidad/1520079336_341562.html
Todavía estoy conmocionada con la noticia. Era un hombre bueno y era feliz. Hace poco, en septiembre pasado, celebramos una "montojada" (reunión de primos Montojo) en Cádiz. Javier, lógicamente estaba allí y nos sirvió de guía de lujo en nuestra visita al Real Instituto y Observatorio de la Armada, donde nos explicó con todo lujo de detalles la historia y los instrumentos allí conservados. Además de un hombre feliz era un erudito en lo suyo. 

Ayer murió, de forma absurda, cayendo al mar desde el buque de investigación oceanográfica Hespérides, en el que se encontraba en el marco de una expedición científica.

Queda María Jesús, su mujer y Alba, su hija que esperaban en Cádiz su regreso. Y queda su madre, mi tía Rosina, una mujer valiente que amaba la vida y nunca se ha rendido a pesar de otro terrible golpe recibido hace unos años con la desaparición de otra hija en accidente de tráfico. La vida -y la muerte- a veces se ensañan especialmente con algunas personas. Hoy es una anciana a la que este mazazo la ha dejado sumida en el silencio, petrificada en su dolor.

No puedo decir nada más. No me las puedo quitar de la cabeza.