Es una buena cosa saber que existes
y meterme en la cama con tu nombre en los
labios.
Es una buena cosa decirte que te quiero
antes de que me abrace la noche y su
espejismo.
Es una buena cosa al despertar
sentir cómo me invade el ansia de tenerte.
sentir cómo me invade el ansia de tenerte.
Es una buena cosa que mi cuerpo
vuelva a vibrar tan solo con pensarte.
Es una buena cosa volverme otra vez niña
y esta sonrisa boba que veo en el espejo.
Es una buena cosa depositar en ti
tantísima a ternura que me sobra.
Es una buena cosa enamorarse.