jueves, 29 de noviembre de 2012

SEGÚN

...y me cuesta escribir la palabra amor
porque el amor es una cosa y la palabra amor es otra cosa
y sólo el alma sabe dónde las dos se encuentran.
(Juan Gelman)
Hoy me da por pensar que las grandes palabras
guardan significados diferentes
según quién las escriba o las pronuncie
y en según qué momento;
según quién las espere, según soplen
huracanes o brisas.

Porque son medicina o alimento
según el alma duela o pase hambre,
bebidas que emborrachan, drogas duras,
narcóticos que duermen el orgullo
y empañan el espejo
según hieran las dudas razonables
de la propia conciencia.

Cerca, lejos, amor o soledad,
amigo, vida, muerte, destino o esperanza,  
palabras que se adaptan
al exacto contorno de la herida
según toque
ser víctima o verdugo de uno mismo.

Justifican errores o maquillan verdades,
verdaderas según cómo se mire.

martes, 27 de noviembre de 2012

FIRMA EN "NUEVO FUTURO"

Por si alguien tiene interés y/o ocasión de pasar por allí, el próximo viernes 30 de noviembre estaré firmando libros en el Rastrillo Nuevo Futuro, a las 18 horas, Pabellón de la Pipa, Avda. de Portugal s/n, stand nº 11. A beneficio de la ONG "Nuevo Futuro". Os agradeceré que lo difundáis.


domingo, 25 de noviembre de 2012

LA GOTA MALAYA

Sin tregua iban cayendo los agravios,
gota a gota, en el punto preciso
hasta que perforaron la materia
que la hacía mujer
o quizá, simplemente, ser humano.

La piltrafa en que estaba convertida
vagaba como un zombi sin recuerdos,
sin afanes, proyectos ni esperanza,
sin voluntad ni fuerza
ni para resistirse a la ignominia.

Supo que estaba muerta
cuando no fue capaz ni de contarlo
porque no halló palabras
que expresaran lo absurdo.

Y sobre todo el día en que las lágrimas
se le pudrieron dentro del silencio.

martes, 20 de noviembre de 2012

EMOCIONES INÚTILES

Hay noches en que una
apenas tiene nada que decir
pero estallan por dentro
emociones inútiles.

Me pregunto a estas horas si es prudente
dejar a la intemperie los puntos vulnerables
aun a costa de ser un blanco fácil
para cualquier saeta envenenada.

Y sí,
es posible vivir sin protecciones,
sin máscaras, disfraces ni caretas,
sin vestir uniforme de campaña; felizmente
siempre hay alguien que obtiene algún provecho.

El precio que se paga es alto, quién lo duda,
pero no es menos cara la sonrisa forzada
ni el tiempo que se pierde en hacer daño.

Amigos, perdonadme, es noche de recuento.
Al final el balance es positivo:
existen insensatos que me quieren.

viernes, 16 de noviembre de 2012

MI CRIATURA

 
Ya ha nacido mi bebé, tiene sólo unas horas y estoy enmimismada mirándole, porque es precioso. Ha sido un parto difícil, una ya no tiene edad para estas cosas. Además me pilló la huelga de la comadrona y tuve que apretar las rodillas un día más. Pero aquí está ya y los dos, madre e hijo, nos encontramos divinamente. Como sabéis, será presentado el próximo viernes 23 de noviembre, en la Asociación de Escritores y Artistas Españoles, calle Leganitos, 10 a las 19,30. Oficiará Enrique Gracia Trinidad. Os esperamos.


martes, 13 de noviembre de 2012

YO, COMO NO ENTIENDO...

Quiero una huelga donde vayamos todos.
Una huelga de brazos, piernas, de cabellos,
una huelga naciendo en cada cuerpo.
(Gioconda Belli)


Dicen los entendidos que no toca,
que ahora no es el momento,
que si la economía
y que si los mercados
y que no sé que prima que ponemos en riesgo.

Y que además saldremos muy feos en la foto.

Las huelgas hay que hacerlas, por lo visto,
cuando no existan pobres,
cuando todos habiten en casas confortables
y se acuesten sin miedo a que los echen.

Cuando todos ejerzan su derecho al trabajo
con un salario digno.

Cuando el futuro espere cargado de promesas
a todos nuestros jóvenes
y no tengan que irse a vivir a otro mundo.

Cuando a nuestros ancianos los atienda el Estado
en justa proporción a lo que dieron,
cuando a los inmigrantes que se juegan la vida
los acoja un país con los brazos abiertos.

Pero yo, que no entiendo, ¡qué ocurrencia!
voy y me pongo en huelga
cuando el hambre se adueña de las calles,
cuando el miedo se agarra en las tripas vacías,
cuando el trabajador está dispuesto
a agachar la cerviz por un sueldo de mierda
y se deja pisar por que coman sus hijos.

Cuando a los que son jóvenes
se les muere el futuro
y no les quedan fuerzas siquiera para amarse,
cuando los que son viejos ambicionan la muerte
como única salida.

Yo, es que, como no entiendo,
voy y me pongo en huelga.

sábado, 10 de noviembre de 2012

VACUNA

No es cierto que las penas
nos sirvan de vacuna de otras penas,
no es verdad que nos salven de tristezas futuras,
no hay un cupo previsto.
Es mentira, nos dejan el alma en carne viva
de manera que escuece hasta el más leve roce.

Lo que ocurre, tal vez, es que aprendemos
a vivir con lo puesto
y se nos forman surcos de amargura
que apenas maquillamos de paciencia;
ya ni siquiera queda recurrir a las lágrimas
y vaciar el tanque por un rato.

Cuando se pudren dentro los dolores
la espalda se nos carga,
caminamos despacio,
los ojos pierden brillo,
la piel se vuelve opaca
y nos hacemos viejos de repente.

Sólo queda el recurso de de agarrarse a unos años
que a lo mejor también fueron mentira.
Pero eso es lo de menos.

jueves, 8 de noviembre de 2012

MAÑANA


He aprendido a vivir el momento presente
disfrutando o sufriendo, según toque.
Y es que las cosas tristes me ocurrieron
hace un millón de años,
ya no me importa nada lo que venga.

Esto debe de ser algo muy parecido
a la decrepitud irrevocable,
pero me da lo mismo si mañana
no existo, mal que bien
creo que he terminado mis deberes.

Amarnos es un lujo
que tal vez no podamos permitirnos,
-qué le vamos a hacer, más se perdió en la guerra-
la tristeza se cura con el tiempo;
lo que no tiene cura es mi manía
de soñar lo imposible. Afortunadamente.

Y este afán insensato
de agarrarme a una vida
empeñada en echarme de su lado.

martes, 6 de noviembre de 2012

LAS HORAS MUERTAS

Hace bastante tiempo
que debería haber cerrado el ojo
porque sé que a las siete
sonará sin piedad el artefacto
y me echará a empujones de la cama.

Pero qué voy a hacer si me pierde la noche
y a estas horas me da por querer a la gente;
cuando queda en silencio la prisa y la rutina
y da igual que se rompan los principios.

A partir del momento en que se duermen
los minutos previstos,
queda el tiempo infinito de encontrarse
con la verdad oculta en lo callado.

Esa forma tan dulce de querer a los otros
sin que atisben siquiera que los pienso,
ese modo tan cierto de extrañarlos,
esos nombres que invaden mi memoria,
algunos muertos y otros bien presentes,
pero todos ajenos a mis noches.

Me voy a ir a dormir, a ver si hay suerte
y vienen en mis sueños a buscarme.